El sector FinTech gana peso en una industria bancaria cada vez más digital y telemática
Por Carlos Sánchez
Parece obvio señalar que la industria de servicios financieros afronta el futuro con una mentalidad completamente diferente a la que tenía en enero de 2020, debido a los profundos cambios a todos los niveles que ha traído consigo la pandemia global. A lo largo de los últimos meses, no hemos dejado de escuchar que la crisis sanitaria y económica está acelerando la adopción de tecnologías digitales. Y, aunque esto es una realidad innegable, para ciertos sectores que ya habían abrazado (y abanderado) en muchos sentidos este cambio, como, por ejemplo, el financiero, lo que se está produciendo es un replanteamiento muy profundo del rol FinTech en el nuevo paradigma que se afronte durante la recuperación.
Así, al menos, lo señala el informe ‘Industry Survey & Report 2021’, elaborado por Fintech Futures, que indica que “las instituciones financieras están comenzando a analizar todo lo referente con el impacto de las nuevas tecnologías en su negocio con una visión más crítica, estudiando si tendrán la misma validez transcurridos unos años”. Lo que sí subraya este documento es que “los consumidores financieros han cambiado definitivamente sus preferencias de lo físico a lo digital, iniciando el proceso de desaparición de los cheques y el efectivo para privilegiar las tarjetas y los pagos digitales”.
Toda esta variación en las preferencias de los usuarios está, a su vez, creando una presión sobre el segmento bancario tradicional para que introduzca en su operativa interfaces, apps y sistemas telemáticos que sean fáciles de usar por los clientes y, sobre todo, resulten seguros. De hecho, el informe citado afirma que este será el principal escenario de batalla para que las compañías logren retener a sus consumidores, lo que, indudablemente, pasa por una integración cada vez mayor entre los bancos tradicionales y los nuevos players digitales Fintech.
El paso adelante de la industria Fintech
Otro informe, en este caso, elaborado por Deloitte bajo el título ‘Beyond Covid-19: New opportunities for fintech companies’, indica como muchas empresas FinTech de todo el mundo, con independencia de su tamaño, “hacen acelerado sus nuevas estrategias operativas de respuesta a la crisis”, a través de medidas como, por ejemplo, incrementar su liquidez o dar entrada en su accionariado a inversores institucionales de peso que les aportan, además de un mayor músculo económico, know-how para crecer en otros sectores y mercados.
Esta nueva realidad ha caminado, según el documento, en paralelo al desarrollo de la tecnología de utilización de los datos de los usuarios, lo que está contribuyendo a que se estén desarrollando nuevas oportunidades futuras para estas empresas de cara a proporcionar una experiencia digital fluida para el cliente con una personalización máxima de los servicios.
Por último, el informe indica una ventaja más para las empresas FinTech en este nuevo ‘campo de juego’ global: “al no tener cargas heredadas de otras tecnologías o estrategias ya obsoletas, están pudiendo construir modelos de plataformas utilizando un enfoque nativo de servicios en la Nube que pueden aprovechar al máximo los sistemas API”. Es decir, que, en muy poco tiempo, estarán en condiciones de desarrollar nuevas aplicaciones novedades gracias a la evolución que están promoviendo entre el software y el interfaz de programación de sus herramientas digitales actuales.