Shopopop llega a España tras levantar 20 millones de euros
Shopopop llega a España tras conseguir una ronda de financiación de 20 millones de euros de la mano del fondo GO Capital, de Épopée Gestion para el fondo West Web Valley I, de Pierre Voillet y de Meridiam, a través del Green Impact Growth Fund.
Fundada en 2016 en Nantes (Francia), Shopopop ha desarrollado la red logística más extensa de Francia en menos de cinco años. Su servicio de entrega se apoya en una comunidad de repartidores privados, los Shoppers, ciudadanos que aprovechan sus viajes diarios para repartir productos a domicilio desde los puntos de venta asociados con la plataforma y reciben una compensación económica a cambio.
En 2020, con el auge del e-commerce producto de la pandemia, Shopopop extendió sus entregas a cinco países: Bélgica, Luxemburgo, Italia, Portugal y Países Bajos. Ahora llega a España para reforzar una red única en Europa, cuyo objetivo es hacer que las entregas a domicilio sean más flexibles, asequibles y sostenibles.
La primera parada de la compañía es Madrid, donde ya ha empezado a tejer una red de tiendas asociadas, entre las que se cuentan floristerías como Mon Parnasse o Natural Bouquet, y la tienda de vinos Vino Premier.
El modelo Shopopop
La situación actual del sector logístico está marcada por la llegada masiva de ofertas vinculadas al ‘Quick Commerce’ (tiendas oscuras, promesas de entregas exprés, etc.), que agravan un problema de eficiencia en la logística de última milla, la parte del proceso más costosa para las empresas.
Shopopop ofrece un modelo de crowdshipping, una rama de la economía colaborativa aplicada a la mensajería que consiste en aprovechar el viaje de una persona para que lleve un paquete a otra que se encuentra en su camino. Como BlaBlaCar, pero con entregas a domicilio.
Su objetivo es fomentar la ayuda mutua y el intercambio de servicios entre particulares. Además, al permitir a los consumidores compartir sus viajes, también contribuye a reducir la congestión en las ciudades y nuestras emisiones de CO2.
Así, el servicio se basa en los desplazamientos habituales de los ciudadanos (escuela, compras, trabajo) que, para ganar un dinero extra y ayudar a su comunidad, recogen las compras de sus vecinos en los puntos de venta y se las entregan. A cambio de este servicio, reciben una contribución a los gastos de entre 5 y 8 euros.
La plataforma trabaja con diferentes tipos de puntos de venta: supermercados, tiendas especializadas (floristerías, tiendas de vino, parafarmacias y perfumerías), y también con comercios independientes.
«Gracias a nuestro modelo de negocio se consigue un óptimo rendimiento logístico con mayor flexibilidad. Por un lado, queremos ayudar al comercio local a competir frente a grandes como Amazon y otros gigantes del e-commerce. Y por otro lado, queremos fomentar la economía colaborativa para que cualquier persona pueda ganar un dinero extra entregando a sus vecinos y potenciando acciones más sostenibles «, explica Clara Lloveres, General Manager para España de Shopopop.
Crecimiento en Francia
Su servicio de entrega está disponible en 15.000 ciudades francesas y se apoya en una comunidad de 300.000 Shoppers. Desde principios de 2021, la plataforma ha organizado más de un millón de entregas para 1.700 puntos de venta, una actividad que se ha multiplicado por más de dos respecto a 2020. Para finales de 2025, tiene previsto desarrollar una red de 50.000 tiendas asociadas.
En Francia, Shopopop trabaja con los principales actores del sector de la distribución alimentaria (Auchan, Carrefour, Casino, E.Leclerc, Intermarché, Système U, etc.), de la distribución especializada (Eram, Bureau Vallée, etc.) y del sector minorista (Eram, Bureau Vallée, Biocoop, L’eau Vive, etc.) y los minoristas locales (Jeff de Bruges, Cavavin, etc.)
«Hemos visto un aumento del 300% en el número de entregas entre 2019 y 2020. Y con más de un millón de entregas entre enero y noviembre de 2021, hemos conseguido retener a nuestros usuarios habituales y atraer a nuevos clientes. Nuestro negocio sigue creciendo y Shopopop ha pasado de ser una solución de emergencia a un reflejo cotidiano. En términos de eficacia y rapidez, nuestra organización es la única alternativa creíble a los gigantes de la subcontratación. Pero defendiendo un modelo social y medioambiental sostenible», subrayan Antoine Cheul y Johan Ricaut, fundadores de Shopopop.