Erik Swords (Mellon – BNY Mellon IM): «Están surgiendo oportunidades en blockchain para empresas»
La gestora BNY Mellon Investment Management, dentro de su amplia gama de estrategias y productos multiactivo, cuenta con el fondo BNY Mellon Blockchain Innovation Fund, cuyo objetivo es conseguir la revalorización del capital a largo plazo invirtiendo principalmente en empresas de activos digitales. Su gestor es Erik Swords, que es uno de los principales culpables del buen desempeño que ha tenido este vehículo durante los últimos meses. A continuación, se recoge la entrevista que ha concedido en exclusiva para TerritorioFinTech.com.
Pregunta: ¿Se ha consolidado el blockchain como una megatendencia de referencia para los próximos años? ¿Qué tipo de inversores están interesados por esta tecnología?
Respuesta: Desde que empezamos a trabajar con esta temática, en 2015, la tecnología de cadena de bloques, o blockchain, ha ido evolucionando como una plataforma digital clave en el ámbito de las transacciones, los registros, la tokenización de activos y, quizás su aspecto más conocido, las criptomonedas. Hasta ahora, nos hemos centrado de forma prioritaria en la tecnología blockchain para empresas, donde están surgiendo numerosas oportunidades a medida que las empresas diseñan, desarrollan y migran sus servicios y sus operaciones a plataformas basadas en blockchain como parte de la economía digital. Tras varios años de intenso desarrollo de la tecnología blockchain para empresas, estamos convencidos de que mercado seguirá su trayectoria hacia lo que se espera que represente una oportunidad económica de largo plazo valorada en 3 billones de dólares.
La pandemia ha provocado importantes cambios en el comportamiento de los consumidores y las empresas de todo el mundo. Afortunadamente, la transformación digital ya estaba bastante avanzada antes de la pandemia, lo que ayudó a resolver muchos de los retos que surgieron. El teletrabajo, la enseñanza a distancia, las videoconferencias, el comercio electrónico y la banca digital se han convertido en aplicaciones y servicios integrales que contribuyen al normal funcionamiento de la sociedad. Las transformaciones sociales y generacionales que se derivan de esta situación tienen profundas implicaciones.
Creemos que blockchain es una de las tecnologías más disruptivas que han surgido desde la adopción generalizada de internet y no está vinculada a ningún sector ni a ninguna área geográfica en concreto, lo que significa que no está limitada sectorial ni geográficamente. En nuestra opinión, es evidente que la economía mundial está avanzando rápidamente hacia una economía digital y la tecnología blockchain desempeña un papel crucial en esta transición.
Nuestro producto es una solución de renta variable que ofrece a los inversores exposición a todo el ecosistema blockchain, del que las criptodivisas solo representan una parte. Es importante saber que los ETF de bitcoin aún no están disponibles en Estados Unidos, por lo que los inversores cuentan con pocos vehículos para invertir directamente en este activo. Nuestra solución mantiene una exposición de aproximadamente el 30% al ecosistema de las criptomonedas, mientras que el otro 70% se centra en otros usos de la tecnología blockchain.
P: Uno de los problemas tradicionales del blockchain ha sido la dificultad en desarrollar modelos de negocio que fueran escalables y, en definitiva, rentables. ¿Ha cambiado esto desde el punto de vista de negocio de las compañías?
R: Como norma general, siempre es mejor invertir en empresas que sean rentables. La salida a bolsa de empresas como Coinbase ha demostrado que un modelo de negocio centrado en la negociación de criptodivisas puede ser tremendamente rentable. Así que, en cierto modo, esto ha validado un aspecto de la evolución de los modelos de negocio basados en blockchain. Existen numerosas empresas en una fase de desarrollo mucho más temprana que Coinbase que aún no han tenido oportunidad de ganar suficiente escala, lo que implica que, por el momento, están perdiendo dinero. Esto no es inusual, sobre todo en un entorno que está experimentando un crecimiento explosivo.
P: Otra de las dificultades habituales residía en la complejidad en la programación de los códigos de software basados en blockchain. ¿Ha logrado ya la tecnología superar este reto?
R: Una de las características definitorias de la tecnología blockchain es que las transacciones quedan registradas en bloques que se vinculan entre sí criptográficamente. Con el tiempo han ido surgiendo dudas sobre los protocolos de seguridad y sobre si tecnologías como la computación cuántica podrían acabar descifrando el código. La respuesta es que, a día de hoy, no lo sabemos, aunque puede que sea posible en la próxima década, a medida que la computación cuántica vaya estando disponible para uso comercial. No obstante, el sector no se quedará quieto, ya que sus intereses se verían amenazados si acaban surgiendo posibles riesgos de seguridad. Y tampoco podemos obviar el hecho de que, incluso con la ayuda de la computación cuántica, se trata de una tarea extremadamente compleja. Por eso, no es algo que me preocupe a corto plazo.
P: ¿Qué industrias serán las grandes beneficiadas en pocos años de la introducción operativa del blockchain? ¿Y desde el punto de vista de la Administración?
R: Vemos muchísimo potencial en áreas como la sanidad, las cadenas de suministro y el sector de alimentación y bebidas. El número de aplicaciones está creciendo de forma exponencial en todos los sectores de actividad a medida que los usuarios potenciales van conociendo las ventajas que aporta esta tecnología. En concreto, las cadenas de suministro son notoriamente ineficientes y podrían beneficiarse en gran medida del uso de blockchain, un sistema que ofrece transparencia y visibilidad de principio a fin para todas las partes implicadas en el suministro de bienes.
En la cadena alimentaria, por ejemplo, ocurren muchas cosas a lo largo de todo el proceso. Disponer de un sistema que documente cada paso en el sistema de gestión de la cadena de suministro es fantástico porque, de repente, toda la información que se registra resulta mucho más relevante. Por ejemplo, si un supermercado se está quedando sin determinadas verduras, se puede informar inmediatamente a los proveedores para que envíen más verduras a los centros de distribución que las necesitan, de forma que lleguen a los clientes.
Además, los datos gestionados por blockchain pueden ayudar a los supermercados a calcular el mejor momento para ajustar el precio de las verduras y así adaptarse de forma más ágil a los cambios en la oferta y la demanda.
La profundidad de los datos sobre las cadenas de suministro que puede aportar blockchain también resulta de utilidad para una nueva generación de consumidores más exigentes que quieren más información sobre el origen de los alimentos y las bebidas que consumen y los productos que compran. En general, los jóvenes de hoy tienen una conciencia ética y medioambiental más desarrollada y quieren conocer todos los detalles sobre los productos que compran y su procedencia. Si pensamos, por ejemplo, en un cartón de leche, blockchain nos permite escanear la etiqueta para saber de dónde viene, cuánto tiempo lleva en la estantería e, incluso, en qué granja se ordeñó a la vaca.
Desde el punto de vista de la Administración, diría que la tecnología blockchain está ganando aceptación entre los reguladores y, en nuestra opinión, ayudará a generar nuevas eficiencias de costes y/o beneficios en términos de ingresos en una amplia variedad de sectores. Nuestra estrategia se propone ganar exposición a empresas que ya han adoptado esta tecnología y que sentarán las bases en sus respectivos sectores.
P: ¿Entornos como Sandbox son propicios para las startups que estén innovando en blockchain?
R: El enorme grado de innovación que existe en la industria ha fomentado la reciente creación de numerosas empresas. Teniendo en cuenta que hablamos de un sector muy joven, nos parece un aspecto muy positivo, ya que el sector va ganando reconocimiento. En Mellon, tenemos la suerte de contar con el equipo de Private Equity, que nos ha presentado a muchas empresas privadas con las que hemos forjado una gran relación. Esto resultará muy útil cuando estas empresas salgan a bolsa y, entretanto, nos proporciona información muy relevante sobre el sector.